
No sabemos su nombre, porque no se menciona en ningún momento, pero si conocemos su idolatría hacia Dewey, el creador de la Clasificación Decimal Universal, y la defensa que hace de Eugene Morel, el introductor de Dewey en Francia y el que puso las bases de las bibliotecas en Francia. Del mismo modo, nos da a conocer a su escritor favorito, Guy de Maupassant, y su odio profundo por Balzac. Defiende la revolución de Robespiere y odia a Napoleón. Pero sobretodo está indignada con que hayan dejado la signatura 400 libre, le crea angustia este espacio vacío en el orden.
También conocemos algo que su vida personal, fue esta provincia, desde París, por amor y allí se ha quedado trabajando, aunque ya no está ese amor, y ahora está secretamente enamorada de un usuario de la biblioteca, adora su nuca e intenta entablar conversación con él, aunque realmente lo que más le gusta es observarle, está extasiada con su nuca.
Es una historia original, muy rápida de leer (no hay ni un punto y aparte), en la que conoceréis muchas “manías” de los bibliotecari@s.
No hay comentarios:
Publicar un comentario